y puede que ahora jamás vuelva.
martes, 31 de agosto de 2010
a Vos
y puede que ahora jamás vuelva.
jueves, 26 de agosto de 2010
Y vos, ¿cuánto cobrás?
domingo, 22 de agosto de 2010
El idioma de Lola
lunes, 9 de agosto de 2010
¡Mujer! ¡Ya no tienes excusas!
- Lavar la ropa blanca con el jabón en polvo indicado: terminarás cantando en las terrazas, rodeada de burbujas, junto a otras mujeres tan felices como vos por dejar su ropa blanca, blanca.
- Ídem para la ropa de color, la ropa negra, la ropa blanca con color.
- Lavar la ropa con jabón líquido: madurarás como mujer y confirmará tu independencia cundo recién te hayas mudado de la casa de "mamá".
- Sacar las manchas con el sacamanchas indicado: te sentirás realizada y hasta los científicos de laboratorio te felicitarán.
- Lavar la ropa con suavizante para ropa: tus hijos te adorarán cuando acaricien sus prendas y te lo dirán.
- Lavar los platos con el detergente concentrado para agua fría: harás quedar fabuloso a tu marido cuando se vayan de campamento, y serán plenos y felices por ganar la competencia del lavado.
- Desinfectar a tus hijos cada 5 segundos con el jabón indicado: serás una heroína que salva a sus hijos de los monstruos bacterianos que amenazan su vida.
- Desinfectar los pisos, el baño, la cocina, los muebles, los juguetes! con el producto indicado: ídem pero además, salvás la vida de tu marido y tu mascota (aunque ésta última, vaya paradoja, también es una amenaza por portar bacterias).
¡Hay tantas maneras, mujer, por favor! Ya no tenés excusas. ¿Que son muchas cosas y muy difíciles e inquietantes para empezar? Tranquila, ve paso a paso.
Cuando hayas podido realizar las que menciono aquí, seguiremos con el listado para profundizar tu felicidad: con qué vestirte, arreglarte, maquillarte, depilarte. Qué comer para no engordar, pero qué cocinarle rico a tu marido para que te adore. Cómo decorar tu casa con productos caros pero también haciendo manualidades. Con qué útiles escolares abastecer la mochila de tu hijo, y con qué juguetes y con qué alimentarlos. Con qué productos cepillar tus dientes, lavar tu cabello, desenredar tu cabello, peinar tu cabello ¡y cuidado si es liso, con ondas, enrulado!. La lista es infinita, pero recuerda. Paso a paso.
¡Inténtalo! El poder está dentro de tí.
¡Lalalá lará lala la lá! ¡Lalalá lará lala la lá!
miércoles, 4 de agosto de 2010
¡Por fin! me enamoré
Viste cómo es. Que si te gusta, que no, que maso, que no me gusta mucho pero me da bola... pero cuando te enamorás no hay duda. ¡Y hace mucho que no me enamoro! mucho mucho. Todos sabemos que el amor aparece en el momento menos pensado y siempre nos sorprende.
Son hermosos.
día 252 - y van...
- día 257 - viernes, lluvia torrencial. Encima no trabajé en mi oficina sino que tuve que viajar (no muy lejos, pero bueh) cargada de paquetes y papeles y paraguas. Al volver a casa, no iba a empezar a pensar en la tesis porque tenía que recuperar una clase de yoga a la que falté ayer (jueves) por ir a la charla motivadora de tesis... pero como dije: mucha lluvia. Ni tesis ni clase.
- día 256 - sábado, desde la mañana y durante toda la tarde vino el técnico a instalarme el split frio-calor (si, si. estuve soportando los veranos de 45º y las olas polares sin él). Claro que no era momento para estudiar. ¡¡Y menos cando se fue, un sábado a la noche!!
- día 255 - domingo. No da.
- día 254 - primer día laboral de la semana: estás dormido por el desbarajuste de horarios de sueño del fin de semana, sumado a que hay el doble de trabajo. ¡Pero sorpresa! Mi compañera de la charla-motivadora-tesística me dejó una cartita en el escriorio que versaba: "Taller de metas: faltan 254 días para recibirte" (si, con ellas bromeábamos al respecto) y adjuntó un apunte. Pensé: qué tierna. Pero ya había quedado cenar en casa de una amiga para trabajar sobre unos proyectos que estamos desarrollando. Llegué a casa a la 1am = de tesis, cero.
- dia 253 - hoy, martes. Trabajo todo el día y dormida, como siempre, por la trasnochada de anoche. Fui al trabajo con las calzas porque aun era tiempo de recuperar la clase de yoga del jueves pasado! Pero trabajé hasta tarde y no llegué a horario. Me fui a casa y me encontré cocinando (para la cena de hoy y para el taper de mañana en la oficina) pero ojo: de repente me sorprendo escribiendo en un word como 25 temas posibles de tesis (cosa que nunca había hecho, los tenía todos en la cabeza). ¿Estaré despertando a la idea de que tendré que hacerla algún día?
Qué aburrido todo esto que escribi. Pero tengo que convencerme que de verdad tengo muchos argumentos para no empezar a hacerla (?)
Quién sabe... mañana miércoles me invitaron a ver unos cortos a las 21 hs. y luego cenar. Tal vez rechace al posible-futuro-galán por venir a casa a pensar en la tesis, ¿no? Si, si. Seguramente.
Creo que la próxima vez que escriba al respecto, no contaré cosas aburridas de días y horarios, sino de todo lo que va aconteciendo en paralelo a eso: quién llamó por fin y no lo podía creer; a dónde me invitó y quién (otro, no el que llamó); de quién me estuve acordando; con quién soñé; lo que pasó con mi jefe; lo que encontré en la oficina en un lugar escondido (¡y que me involucra!); qué brillante idea se me ocurrió para salvar al mundo; y todo ese tipo de cosas importantes.
¡Y ni loca lo sigo haciendo día por día! qué embole.
Al menos, hice la lista de temas posibles de tesis. Algo es algo.
lunes, 2 de agosto de 2010
Integridad ¿un valor?
Espontáneamente y en el uso coloquial que le doy yo, Integridad vendría a ser algo así como respetar los valores que uno tiene, pero por el respeto a uno mismo en todo momento y lugar (no lo confundiría con convicción, que es más parcial). Entonces, el eje comparativo es la misma persona. Su manifestación sería que esa persona hace las cosas en función de sus propios valores. Resumiendo: dice lo que piensa, hace lo que dice, y en todos los ámbitos de su vida. Para mí, y hoy, eso sería integridad.
¿Acaso cambiar de discurso en uno u otro ámbito es parte de un valor propio (por ejemplo, un manipulador), por lo que no dejaría de ser íntegro el hacerlo?
¿Tan difícil es decir lo que se piensa, hacer lo que se dice e ir, en el camino, creciendo y mutando y aprendiendo y conociendo para que también el hacer nos enriquezca el pensar (y no sólo "importar" valores ajenos)? Llegar a nuevas conclusiones e ideas, tal vez nuevos valores, y decirlos y actuar en consecuencia... ¡Esto no debería ser un valor! Debería ser respeto a uno mismo.
domingo, 1 de agosto de 2010
¿Has de beber?
CHAU
Pero no dejaba de fantasear con toda clase de respuestas posibles, siempre que me tenían a mí como la más deseada y a él el más enamorado.